Artículo sobre la película "El príncipe de las mareas"

Esta película nos muestra la vida de un hombre llamado Tom que ha vivido una infancia muy traumática junto a sus hermanos y sus padres y esto les ha causado un gran problema ahora siendo mayores.
Sufrieron muchos momentos violentos y agresivos. Esto conllevó muchos problemas en su presente, siendo mayores. La pequeña de la familia llamada Sabana, parece que le afectó mucho más todo esto ya que intentó suicidarse varias veces a lo largo de su vida, esto viene por un suceso traumático que le sucedió en el pasado, cuando vivía con sus padres en la casa de la Costa del Sur.
Sabana, viviendo en Nueva York intentó suicidarse otra vez. Ella estaba siendo vista por una psiquiatra llamada Lowenstein que intenaba buscar el principio del problema que le llevaba a intentar suicidarse. Como Sabana no quería contar sus intimidades del pasado y el por qué de intentar suicidarse, la psiquiatra llamó a terapia a su hermano Tom. Este vino desde la Costa del Sur para poder ayudar a su hermana contando anécdotas de su traumático pasado.
Poco a poco fue cogiendo confianza y contando todo lo que les pasaba, pero no quería contar lo que realmente les ocurrió y por qué sucedía eso. Después de un tiempo, al final contó lo que verdaderamente pasó una noche y por qué Sabana desde esa noche intentaba suicidarse. La psiquiatra después de escucharlo, descubrió el por qué de esto. La mente de Sabana intentaba bloquear los malos recuerdos y no saber nada de ellos, pero es lo que le condicionaba a intentar quitarse la vida. Aunque por otro lado, Tom también intentó bloquear estos recuerdos y no saber de ellos, por eso le costó tanto decir qué pasó y cómo actuó en ese momento.
Esto pudo ayudar a Sabana y a que se pudiera recuperar.

La mente puede servir a nuestro favor o a nuestra contra, en este caso le llevó a que su vida estuviera condicionada por todos los recuerdos que tenía bloqueados en su mente y que no quería mostrar al mundo. Si hubiera enfrentado el tema desde el principio pudiera haber tenido una vida más feliz y no tan triste al intentar desaparecer.